Es la primera novela que leo de Bernard Minier. Hay toda una saga de este policía y no he empezado por la primera, pero yo soy así de desordenada. ¡Vaya miedo he pasado! Hasta he soñado con el libro. Sobre todo al principio, luego ya te haces a los psicópatas. He sufrido tanto como con Jo Nesbø o Pierre Lemaitre. He estado a punto de meterlo en el congelador, como hacía Joey en Friends con Mujercitas. La escena con la que empieza la novela, con Sevaz perseguido por lobos, me ha puesto los pelos de punta. Y luego toda la trama, con la protagonista perseguida por una mente perversa que parece querer volverla loca. Por supuesto, requiere que aceptes la premisa de que hay gente tan diabólica e inteligente que casi parece que tenga poderes y una protagonista que parece no tener ni un amigo en el mundo, pero una vez hecho ese ejercicio de fe, lo he pasado muy bien. Pienso leer más aventuras de Servaz.
