Tal como prometí en mi reciente viaje a Madeira, paso a contaros la vida de san Respicio.La verdad es que no ha sido nada fácil encontrar información sobre este santo, más allá que su día se celebra el 10 de noviembre y que comparte fecha con san Trifón y santa Ninfa. Esta última es una de las cuatro patronas de Palermo y ya conté aquí que tiene una biografía más que dudosa. No es que de san Trifón haya mucha cosa más, pero al menos sabemos que es el protector frente a los insectos, con lo que en verano debe recibir muchas plegarias. Ni en mi fantástico libro La leyenda dorada dicen nada sobre este pobre mártir. Sabemos que era de Bitinia, que era una ciudad situada en lo que hoy es Turquía, que fue perseguido por cristiano en la época del emperador Decio. Tuvo lo típico: potro, clavos en los pies, quemarle con hachas encendidas y, por fin, decapitación. Después de todo eso y con un nombre que significa "el que mira hacia atrás", no entiendo que no tenga un puesto más importante en el santoral. Vista la imagen, para mí que predicaba y de ahí le vino el martirio. En Madeira dicen que es un nombre común en España. No sé vosotros, yo no conozco a ni un solo Respicio (tampoco Trifón ni Ninfa, para ser sincera).
