Es el primer libro que leo de Carme Chaparro y, de no haber estado en Storytell, no creo que lo hubiese elegido. Me ha gustado más de lo que pensaba, la trama te atrapa desde el primer momento y algunos personajes, como el forense que por las noches se convierte en una cantante llamada Delito, darían para una serie. La historia empieza muy potente: diez personas se lanzan al vacío desde diferentes habitaciones de un hotel de Madrid. No tienen nada en común, no se conocen entre sí y son muy diferentes en todo. A Santi, el forense-cantante, le tocará hacer las autopsias y descubrir algo inquietante. Por otro lado, Berta, una periodista que huyó del país por un escándalo, regresa a Madrid pese a que está en peligro. Juntos deberán desentrañar los misterios que les preocupan. Como digo, la trama es interesante y está bien llevada, con mucho ritmo, aunque el desenlace me parece muy fantasioso y es lo que menos me ha gustado de la novela. Con todo, es un thriller entretenido para el verano.
