Soy muy fan de Leticia Sánchez Ruiz. Diréis que soy muy fan de todo el mundo, pero no es cierto, tengo mi pequeño grupo de favoritos. Leticia no solo me gusta por sus libros, aunque solo la he visto una vez y no hablamos casi nada, me cae fenomenal. Todo lo que pone en redes me gusta y me divierte. Es una gansa y me gustaría ser amiga suya. Creo que voy a tener que añadir a mi grupo a Jorge Salvador Galindo, porque este es un libro a cuatro manos.
Hace poco hice una reseña de un libro que me gustó mucho y dije que era delicado y elegante. Ni con la mejor de las intenciones diría esto de La carretera del infierno. Es un libro gamberro, irreverente, inclasificable. No he leído nada que se le parezca, quizás me pueda recordar a Jasper Fforde. Es una mezcla explosiva de ciencia ficción, road novel (si existe ese género) y disparate divertido. No os puedo aclarar más, hay que leerla y casi es mejor no saber mucho. Os vais a enamorar de Djuna y Soriano y entre ellos ya se describen muy bien, no hace falta que lo haga yo. Esperando la siguiente entrega de Oficina de peligros.