Este es el primer libro que leo de Víctor del Árbol, aunque había oído hablar mucho de él, y no tengo una sensación clara de si me ha gustado o no. Es un libro extenso, que transcurre en diferentes épocas y escenarios y presenta varias tramas que se entrelazan. Desde 1933 en la URSS a 2004 en Barcelona. Gulags, espionaje, guerras y en la trama actual mafias que controlan , entre otras cosas, la prostitución infantil. Todo narrado alrededor de una familia: Elías y Esperanza, los padres, Gonzalo y Laura, los hijos, Y Javier, Patricia y Roberto, los nietos. La novela arranca con el asesinato de Roberto, hijo de Laura, a manos de las mafias rusas. A partir viajamos atrás y adelante colocando las piezas que componen el rompecabezas familiar. Me parece que está bien escrita y me ha interesado más la parte del pasado, pero me parece un poco excesiva, esos malos tan malvados y un poco excesivamente larga, aunque tampoco puedo decir que se haga pesada. Creo que leeré alguna más de este autor para decidir qué opino de él. Eso sí, hay una cosa que Victor del árbol no sabe: jardinería. En su novela las orquídeas y las alegrías africanas emanan delicados perfumes y ni la una ni la otra huelen a nada.
UN MILLÓN DE GOTAS (MONA JACINTA)
Este es el primer libro que leo de Víctor del Árbol, aunque había oído hablar mucho de él, y no tengo una sensación clara de si me ha gustado o no. Es un libro extenso, que transcurre en diferentes épocas y escenarios y presenta varias tramas que se entrelazan. Desde 1933 en la URSS a 2004 en Barcelona. Gulags, espionaje, guerras y en la trama actual mafias que controlan , entre otras cosas, la prostitución infantil. Todo narrado alrededor de una familia: Elías y Esperanza, los padres, Gonzalo y Laura, los hijos, Y Javier, Patricia y Roberto, los nietos. La novela arranca con el asesinato de Roberto, hijo de Laura, a manos de las mafias rusas. A partir viajamos atrás y adelante colocando las piezas que componen el rompecabezas familiar. Me parece que está bien escrita y me ha interesado más la parte del pasado, pero me parece un poco excesiva, esos malos tan malvados y un poco excesivamente larga, aunque tampoco puedo decir que se haga pesada. Creo que leeré alguna más de este autor para decidir qué opino de él. Eso sí, hay una cosa que Victor del árbol no sabe: jardinería. En su novela las orquídeas y las alegrías africanas emanan delicados perfumes y ni la una ni la otra huelen a nada.