Por fin, ya ha salido el tercer libro de la saga de los Cazalet. Temía no recordar lo que le pasaba a cada miembro de la familia, pero enseguida me he puesto al día. Sigue la II Guerra Mundial, las adolescentes ya son mujeres jóvenes que viven en Londres y todos los personajes crecen, evolucionan, los vas conociendo cada vez mejor y no sé qué será de mí cuando lea el último. La guerra lo envuelve todo con un manto opresivo y gris y, pese a todo, la gente sigue enamorándose, trabajando y viviendo. Durante la lectura no hacía más que pensar "suerte que no nos ha tocado vivir una guerra". Es increíble lo que los humanos somos capaces de soportar.
También me removía la situación de las mujeres. Quedará mucho por andar, pero hemos avanzado mucho. Una vez más, el libro se devora y se disfruta cada página. Corred a por él. Señores de Siruela ¡saquen el cuarto, por Dios!
También me removía la situación de las mujeres. Quedará mucho por andar, pero hemos avanzado mucho. Una vez más, el libro se devora y se disfruta cada página. Corred a por él. Señores de Siruela ¡saquen el cuarto, por Dios!