Intérpretes: Jessica Chastain, Mark Strong, Gugu Mbatha-Raw, Alison Pill, Jake Lacy, Michael Stuhlbarg, John Lithgow, Douglas Smith, Sam Waterston, Ennis Esmer, Alexandra Castillo, Meghann Fahy, Noah Robbins, Lucy Owen, Raoul Bhaneja
Esta era la peli que yo necesitaba ayer: un thriller de los buenos, una película que no engaña a nadie, lo que viene siendo un best-seller en cine.
Elizabeth Sloane (Jessica Chastain, qué mona está esta chica siempre)es la mejor lobbysta de Washington. Este oficio, que aquí no se conoce, consiste en conseguir como sea en hacer presión para que se apoye o derogue una ley. Da igual que sea el aceite de palma que la pena de muerte, que tengas que estar a favor o en contra. Se hace y punto. A la protagonista lo que le importa es ganar, pisando a quien sea, sin importarle a quién traiciona o qué medios utiliza: todo vale. Cuando le proponen apoyar a un importante grupo que está en contra de una regulación sobre las armas de fuego, Sloane se cambia de agencia y se coloca con un grupo que está a favor de la regulación. Pese a que estás con la protagonista en el fin que persigue, no dejas de escandalizarte con los medios que utiliza. Pero la película está llena de giros sorprendentes y, aunque dura más de dos horas, no decae en ningún momento y no se hace larga. Vale que se podía haber trabajado más la idea de fondo y hacer una peli más profunda, pero yo con este producto me doy por más que satisfecha. Venga, vamos a darle
