Dirección: Gianfranco Rosi
Esta película-documental, no sé muy bien como definirla, nos muestra la vida diaria de un niño de 12 años, Samuel, y su familia en Lampedusa. Es una familia normal, sencilla, en una isla totalmente anormal en los últimos años. Se alternan imágenes de la vida de la familia con los rescates de inmigrantes (o migrantes, como se dice ahora), los reconocimientos médicos, su vida diaria y la gente que intenta ayudarles. No es tremendista, no lo necesita, es una visión delicada sobre un problema monstruoso. Me ha impactado una frase de una canción que canta uno de los hombres rescatados: "es arriesgado no arriesgarse porque la vida es riesgo". Samuel es un niño maravilloso que parece que haya estado siempre delante de una cámara. Excelente para sacudir conciencias.