Mascotas
90 minutos.
Dirección: Chris Renaud, Yarrow Cheney.
Mascotas no es la película más original de la Historia de la animación. Pese a ser un popurrí de otras historias míticas del ideario colectivo, no le impiden ser también un producto más que digno. Un entretenimiento perfectamente construido. De manual, vale, pero muy solvente. Los amantes de la Dama y el vagabundo, 101 dálmatas o Toy story se llevarán las manos a la cabeza y reconocerán en Mascotas las más que evidentes referencias que rozan el plagio. Y yo añado que sí, pero que muy bien hecha.
Para mí, descartado el argumento nada original, lo más destacable de esta película es, justo, lo que era difícil plagiar. Lo que sí tiene de original. Por un lado, el retrato de Nueva York, simplemente fascinante y, por otro, como, a través de trozos de argumentos de otras películas, ha logrado crear su propio argumento con una más que filosófica reflexión sobre el bien y el mal, o mejor: los buenos y los malos, muy alejado del maniqueísmo al que los referentes de Mascotas nos tenían acostumbrados.
Si en la Historia del cine se tardó medio siglo en llegar a la post-modernidad, en la breve Historia del cine de animación en 3D parece que no han tardado ni una década, y nos dibuja un panorama desolador sobre el arte y el negocio de contar historias a través de sonidos e imágenes en movimiento, aunque sean a través de un producto (por encima de cualquier otra cosa) la mar de entretenido y bien construido.
Sí, está plagada de guiños. Gracias por el comentario.
Pues sin ser nada del otro mundo, sí que me ha gustado ese retrato de Nueva York a ras de suelo, desde la altura de las mascotas, y el conejito psicópata 🙂 ¿No te parece que la humana de Max es un tiernísimo homenaje a la Audrey Hepbrun de "Desayuno con diamantes"? (igual se me ha ido la olla, pero me la recordaba). Bss