Director: Raúl Garcia
Intérpretes: participación de Guillermo del Toro, el recientemente fallecido Christopher Lee, Roger Corman, Julian Sands y Bela Lugosi.
Cinco cortometrajes, basados todos ellos en historias del gran Edgar Allan Poe. García ha optado por un acercamiento diferente a cada una de las historias para así resaltar su personalidad propia y el resultado ha gozado de una muy buena acogida en los festivales en los que ya ha podido verse. En los intervalos que sirven para la unión de las cinco historias, un cuervo charla con la Muerte (en forma de mujer, claro) en un cementerio. El cuervo, como no podía ser de otra forma, es el animal escogido para encarnar a Poe. Lógicamente alguna historia nos gusta más que otra. Creemos que el hecho de mezclar el género animado con el miedo o la intriga le da un toque macabro al asunto. Es interesante y te mantiene un limbo de realidad y ficción que hace "poner caras", ya que remueve nuestra feliz infancia con "la muerte", nunca mejor dicho.
En general está bien, aunque he de reconocer que me la imaginaba de otra manera. Por eso le damos:
Intérpretes: participación de Guillermo del Toro, el recientemente fallecido Christopher Lee, Roger Corman, Julian Sands y Bela Lugosi.
Cinco cortometrajes, basados todos ellos en historias del gran Edgar Allan Poe. García ha optado por un acercamiento diferente a cada una de las historias para así resaltar su personalidad propia y el resultado ha gozado de una muy buena acogida en los festivales en los que ya ha podido verse. En los intervalos que sirven para la unión de las cinco historias, un cuervo charla con la Muerte (en forma de mujer, claro) en un cementerio. El cuervo, como no podía ser de otra forma, es el animal escogido para encarnar a Poe. Lógicamente alguna historia nos gusta más que otra. Creemos que el hecho de mezclar el género animado con el miedo o la intriga le da un toque macabro al asunto. Es interesante y te mantiene un limbo de realidad y ficción que hace "poner caras", ya que remueve nuestra feliz infancia con "la muerte", nunca mejor dicho.
En general está bien, aunque he de reconocer que me la imaginaba de otra manera. Por eso le damos: