La historia se desarrolla principalmente en Tokio, donde el detective Honma, un hombre viudo que vive con su hijo Makoto, está pasando una mala racha. Está de baja, intentando recuperarse con rehabilitación de las secuelas de un accidente. Un día aparece su sobrino muy angustiado porque su prometida ha desaparecido sin dejar rastro. Por ayudarle y por no sentirse tan inútil, Homa emprende la búsqueda de la chica. Pero las cosas siempre son más complicadas de lo que parecen y vamos siguiendo el rastro de la mujer desaparecida por varias ciudades de Japón, descubriendo qué puede llevar a bastantes personas a declarase en bancarrota y cómo es un país tan diferente del nuestro. El final quizás es lo que menos me ha gustado, pero en conjunto es una novela interesante y le damos
