Director: Mike Newell
Intérpretes: Jeremy Irvine; Helena Bonham Carter, Ralph Fiennes, Holiday Granger
Ayer tuve mal día. Cada vez es más difícil volver a la rutina después de vacaciones (que me perdonen todos los parados) y, como era día del espectador, decidí darme un homenaje y ver Grandes esperanzas. Me gusta mucho Dickens y esas novelas larguísimas en las que pasan tantas cosas y hay tantos personajes fascinantes. La película es fiel a la novela, sin modernidades tipo Ana Karenina, con una ambientación preciosa, muy gótica. Pero... Ya diréis que estoy hecha una tiquismiquis, últimamente nada me convence, qué le voy a hacer. La película es correcta pero no conmueve. Quizás es que este tipo de novela tan larga y llena de detalles se adapta mal al cine, a lo mejor una serie de televisión haría que se perdieran menos matices. Los actores están bien, aunque Helena Bonham Carter me parecía más apropiada para la casa del terror de un parque temático que para un personaje de Dickens. Con todo la película se disfruta, no se hace pesada y me reconcilió con la vuelta al trabajo, suficiente para un miércoles que parecía de ceniza.