
Abril se verá obligada a compartir la casa con Alex, que también anda buscando su sitio en el mundo. Juntos dirigirán la biblioteca y el club de lectura, que incluye a muchos de mis libros favoritos. Yo ya me veía allí, junto a la chimenea, con un té Earl Grey leyendo Drácula o Cumbres borrascosas. También se nota que la autora es más de invierno y paisajes fríos, neblinosos y un poco melancólicos. No me imagino una novela suya situada en un desierto o una jungla, ella es más de bosques encantados, páramos con brezo o pueblos pirenaicos. Como siempre, un placer.

Debería intentar lo de la novela en la jungla, por eso tan de moda de salir de la zona de confort, pero, mira, con lo a gusto que estoy junto a la chimenea, me parece que no ;-)) Muchas gracias, Laura. Un beso grande.
Deja, deja, lo de salir de la zona de confort es antifeelgood. Nosotras a la madriguera.