Todo el mundo hablaba bien de esta novela, lo que a veces da miedo. Se lleva una cada decepción... Pero no es el caso con Piel quemada: novelón. Negra, negrísima, seca como la mojama. áspera como el papel de lija y fascinante desde el capítulo uno hasta el final. Pauline es una mujer fatal que recuerda a las películas de los años 40-50. Una pelirroja atractiva y misteriosa que abandona a su marido y su hija y se instala en Belleville, un pueblo de Delaware de esos que parece estar "in the middle of nowhere". Adam es un detective encargado de buscarla que, según la va conociendo, se va sintiendo cada vez más atraido por ella. Nadie dice toda la verdad. Pasiones y mentiras se van entrelazando hasta llegar a un espléndido final. Las mujeres fatales tienen muchas más capas de las que aparentan. No os la perdáis.
