Ya está a la venta. Yo ya la había leído porque Noelia me tiene enchufada, pero vosotros ya podéis correr a por ella. Tenéis que leer esta novela con mucho cariño porque quizás no haya más de Eider Chasserau y Jon Ander Macua. Yo prefiero pensar que nuestros ertainas favoritos se toman unas vacaciones, que bien merecidas las tienen. Además, estoy segura que Noelia nos prepará bonitas sorpresas con su nueva serie. En esta ocasión, la utora abre una nueva caja de los horrores: Hemos visto muchos monstruos de la mano de Eider y Jon Ander. Nos enfrentado a asesinos en serie, tráfico de mujeres, gente sin escrúpulos y ahora veremos de cerca uno de los delitos que más nos puede repugnar: el cometido contra niños.
Creo que es de las pocas cosas que haría capaz de un linchamiento al más templado y, por supuesto, va a conmover terriblemente a nuestros protagonistas. La historia arranca cuando encuentran a un adolescente que fue secuestrado siete años atrás. Su hermana lo acoge con emoción ya que, además, sus padres murieron en un accidente. ¿Qué hay detrás de ese secuestro? ¿Es el joven quién dice ser? y, de no ser así, ¿por qué lo reconoce su hermana?
La investigación será difícil y peligrosa, aunque también habrá momentos llenos de luz a pesar de ese entorno tan sordido. ¡No os la perdáis!