Me he llevado una desilusión con Piranesi. Probablemente por mis altas expectativas. Me encantó Jonathan Strange y el señor Norrell y supongo que esperaba algo similar, sin embargo, Piranesi no tiene nada que ver. Es una novela extraña, metafórica, con imágenes de mucha belleza y que desde luego no deja indiferente, pero no sé si la he entendido. Piranesi es un hombre joven que vive en una inmensa mansión de más de 7000 habitaciones, repleta de estatuas, con mareas e inundaciones periódicas. El único ser humano que suele ver es El Otro, con el que solo puede mantener contactos quincenales. El protagonista es feliz en ese extraño mundo donde cuida a sus muertos, pesca su comida y escribe un diario. Hasta que otra presencia aparece en ese mundo. Me ha costado entrar en la historia y me producía un cierto desasosiego, me vuelve a la cabeza, como si conociera ese mundo donde vive Piranesi, pero no sé qué nos quería contar Susanna Clarke en este libro que parece un sueño. Me recordaba al mito de la caverna de Platón, como si fuera un reflejo del mundo, pero ya sabéis que soy una mona terrenal y pragmática y estas cosas tan sutiles no son muy de mi gusto. Con tristeza no puedo darle más de
PIRANESI (MONA JACINTA)
Me he llevado una desilusión con Piranesi. Probablemente por mis altas expectativas. Me encantó Jonathan Strange y el señor Norrell y supongo que esperaba algo similar, sin embargo, Piranesi no tiene nada que ver. Es una novela extraña, metafórica, con imágenes de mucha belleza y que desde luego no deja indiferente, pero no sé si la he entendido. Piranesi es un hombre joven que vive en una inmensa mansión de más de 7000 habitaciones, repleta de estatuas, con mareas e inundaciones periódicas. El único ser humano que suele ver es El Otro, con el que solo puede mantener contactos quincenales. El protagonista es feliz en ese extraño mundo donde cuida a sus muertos, pesca su comida y escribe un diario. Hasta que otra presencia aparece en ese mundo. Me ha costado entrar en la historia y me producía un cierto desasosiego, me vuelve a la cabeza, como si conociera ese mundo donde vive Piranesi, pero no sé qué nos quería contar Susanna Clarke en este libro que parece un sueño. Me recordaba al mito de la caverna de Platón, como si fuera un reflejo del mundo, pero ya sabéis que soy una mona terrenal y pragmática y estas cosas tan sutiles no son muy de mi gusto. Con tristeza no puedo darle más de
Hola. Acabo de leer el de relatos de Grace Adieu. Veo que esto no tiene nada que ver, ya lo decía Mónica en su reseña. Por lo que nos cuentas tú, me ha dado la sensación de que es como algunas de las novelas de Murakami, esas que parece que solo las entendió él. Igual es demasiado metafórica y filosófica para mí aunque lo raro me gusta.
Un saludo
Qué gracia. Justo ahora pensaba leer algo de Murakami. Nunca lo he intentado porque algo me decía que no me iba a gustar, pero estoy en modo riesgo! Piranesi es muy extraña, pero igual puedes darle una oportunidad. Si la lees y la entiendes, me cuentas.
Ay, darling, es que no tiene nada que ver con «Jonathan Strange y el señor Norrell», creo que se debería insistir más en ese aspecto para que los lectores fans no se lleven una desilusión. A mí me sorprendió que una escritora pudiese cambiar hasta tal punto de registro, de voz, de estilo, ¡es que «Piranesi» parece obra de otra autora! Me quito el sombrero, me parece muy difícil cambiar así de tercio. Pero reconoce que, aunque no hayas acabado de conectar, que la novela es original y única, toda una sorpresa, de esos libros en los que puedes seguir pensando días después de haberlos terminado. Besos.
Te doy la razón. La novela es original, está bien escrita y algo tiene cuando te vuelve a la cabeza al terminarla. Quizás la decepción parte de mis expectativas…