- Año: 2013
- Duración: 96 min.
- Director: Roman Polanski
- Guión: Roman Polanski, David Ives
- Música: Alexandre Desplat
- Fotografía: Pawel Edelman
- Reparto: Emmanuelle Seigner
- Mathieu Amalric
De no ser por dos escenas al final, y de cinco minutos que le sobran, sería perfecta. Una obra de teatro perfecta.
Las dos historias que nos cuenta: la seducción de lo perverso y la confusión entre representación y modelo —recuerde que modelo significa objeto representado, pero también representación—; nos han sido contadas en innumerables ocasiones, pero Polanski ha tenido la habilidad de equilibrarlas en una mezcla casi perfecta. (Pero casi implica negación).
Antes de que esta se estrenara, ya había una docena de películas de 'La Venus de las pieles' que intentaron seducirnos con lo perverso. Algunas tan únicas como la de Jesús Franco de 1969. Y algunas tan abstrusas —para los que no conocemos su cultura— como la coreana de 2010. En esta de 2013 hay escenas sacadas de 'Historia de O' (1975), calcadas de la 'Mujer flambeada' (1983), y hasta inspiradas en 'Click' (1983), el comic de Manara. Pero la copia no molesta. Los niños piden que les contemos las historias una y otra vez sin desviarnos del guión. Incluso nos riñen cuando tergiversamos las versiones que conocen. Así, los espectadores agradecemos las referencias constantes a Sacher-Masoch que el siglo XX nos contó desde pequeños.
Respecto a la historia de confusión entre modelo y representación, esta obra recuerda, en algunas escenas, a las mejores de 'Cabaret' (1972) o de 'En lo más crudo del crudo invierno' (1995). Es este un cuento que nunca acabará mientras exista el lenguaje. Esa cosa que nos permite afirmar: esta crítica es una pura mentira.
Por cierto, toda actriz desea un papel como el que la película ofrece a Emmanuelle Seigner. Pero estoy seguro de que no cualquier actriz lo hubiera resuelto de un modo tan sobresaliente.
Y —¡que casualidad!— Mathieu Amalric nos recuerda a Roman Polanski en algún otro momento más joven de su vida.