Intérpretes: Mads Mikkelsen, Alexandra Rapaport, Thomas Bo Larsen, Annika Wedderkopp, Anne Luise Hassing, Lars Ranthe
Todavía tengo los pelos como escarpias de la impresión que me produjo ayer está película danesa.
Cuenta la historia de un hombre que es ajustado injustamente de abusos sexuales a niños. Vive en un pueblo pequeño, de aspecto idílico, con bosques, ciervos y amigos de toda la vida.
Lo que más impresiona de la película, más que lo mal que lo pasa el protagonista, es la actitud de las buenas personas.
Los abusos a niños generan en todos una alarma tan grande que es difícil conceder el beneficio de la duda. La presunción de inocencia no suele darse entre nosotros. Habitualmente juzgamos a la gente por lo que leemos en la prensa, todos tenemos una opinión sobre si la Pantoja es culpable, o si los padres de la pequeña Madeleine tenían algo que ver en la desaparición de la niña. Me da miedo pensar qué haría yo si acusaran a mi vecino de pederasta. Creo que está muy bien que una película te remueva cosas y te haga pensar. Aunque duela.
Es brutal… a mí también me removió mucho. Lo peor es que es la pura verdad, todos prejuzgamos con una facilidad pasmosa. Da miedo.